Se busca comunicar,
se escurre por el umbral,
con su carne de símbolos
para no incinerar.
Teje sincronías
con relojes y dedal.
Cruza los hilos de día
y en la noche los hace brillar.
Oh, puedo de cerca
escuchar su canto,
no está hecho de melodías:
es de amor encendido
y sagrado llanto.
Su ser absoluto
se filtra en lo material.
Pide prestados rostros
y voces para llamar.
Puedo escuchar su pluma,
dibuja entre secretos,
está haciendo un poema
y me enreda entre sus versos.
Mueve los hilos
con carrete de eternidad.
Algo ha entrado en mi vida
y no sé si partirá.